Miedos...

Aún recuerdo esos momentos en que todo era prácticamente ideal, sentirse querido por mi tata , abuela y mi familia en general ; existía una base solida de valores y principios que se de repente se vio envuelta en palabras deshechas que simplemente se las llevaba el viento. Todo lo que había tenido y vivido se sustentaba en una pieza o más bien pilar que le daba credibilidad y firmeza a lo que me habían enseñado .

Cuando esta ya no estaba me sentí engañado , me sentía vulnerable ante la maldad y envidia por ende decidí emprender un nuevo camino. Estaba totalmente convencido en que esto iba a funcionar . Al principio fue todo color de rosas pero eso era sólo una faceta , aún faltaba lo que haría caer en crisis una relación entre madre e hijo , un aire enrarecido insistía en asechar una relación basada en la confianza , la que luego se vio invadida en dimes y diretes queme afectaban más que fortalecían.

Me sentía en una juguera, la que crudamente destrozaba mi sonrisa. Como todo esto también debía explotar, llego el día en que arrancamos , un día en que divise una pequeña luz en nuestro horizonte , pensé que comenzaríamos a construir una familia, la que hace tanto tiempo anhelaba. Pero no , sólo eran ilusiones , una vez más me quedaba solo , esta vez entre cuatro paredes , no me gustaba el ambiente , fueron tiempos en los que prefería salir a las siete de la mañana y volver a las once de la noche , trataba de huir de mi realidad gastando mi tiempo en juntas con amigos , dar vueltas en el centro capitalino y muchas veces ir a carretes y volver al otro dia.

No iba a clases , de alguna manera inconscientemente debía llamar la atención, pedía auxilio a gritos pero lo único que conseguía eran palabras que caían una vez más en un vació pero realmente lo que necesitaba eran acciones, las que no veía cercanas porque tal vez tenia un costo que no se estaba dispuesto a pagar .

Llego el día en que me dicen que volvía a Concepción y no solo si no que con mi mamá y hermana; me sentía feliz pero a la vez rondaba en mi la incredulidad , porqué mi mamá se iría después .

Llegue acá y no me sentía en mi hogar ; me sentía absolutamente ajeno a la casa de mi abuelo ; yo pensé que viviríamos ahí todos , sin embargo a través de un gesto ameno me entere que nos arrendarían una casa pequeña para nosotros .

Sentí que había sacado a mi mamá de un ambiente marcado por la violencia , pero a pesar de esto ella sentía que había sacrificado su vida por un joven que mayormente no valía la pena, sentí que lo hacia por obligación por el solo hecho de llevar uno de sus apellidos.

Momentos difíciles , angustiantes , de soledad pero por sobre todo de frustración .

Tengo miedo , deseo dormir y no despertar más ...

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Fabrizio